martes

끝अंत结束

estaba en brigada para el caos determinante que esperaba que todo fuera tan frágil e incesante si es que no volvía a sentir mi aliento sobre mis rodillas supondría al menos quel intento de excluirme del aparato ideológico había triunfado un sube y baja que llenaba el espacio en blanco recuerdo sonar más estupefacta pero ya nada podía hacer la diferencia habrá sido el movimiento titiritesko kontinuo y kiskilloso antes de despertar esperar llover una gramática incalculable inigualable postrado desteñido dulce y celeste como el abismo del pentágono ioritico e impasible al final esa es la maldición adivinarse dentro del cuadro desolado te perseguía la muerte y pensabas qué no pensabas una vez pensé que el recuerdo me quemaría el cerebro la ilusión de poder oír ese sermón viejo de una desidia predecida por los más bajos estándares de mi poca alma perversa es mi necesidad mi deseo maldito el poder odiarte por haberme dejado tan sola sin siquiera un muerto viviente para compartir mi dislexia so suddenly llegamos al mar con los ojos vendados tu boca a la mitad te juro que salté de alegría sobre mi cama aquella vez mea culpa dijo el visitante mientras giraba su cabeza en trescientos sesenta grados perdón si cuando te dije que no sabía quién era jung te decepcioné pero el perdón sólo lo da dios y vos no sos dios ni gardel y ya no creo en él simple y formal emocionante orgullo visual un avión se estrellaba en la quebrada lograba al fin la dosis de morfina luego de casi más de dos años las agujas rebosaban sangre la mejor sensación desde ese lorazepam todo se veía bello y como era poco tiempo me hacía sentir que se dispersaba todo tantas orquídeas florecientes quemándose desde adentro me hacían ahogar me hacían suspirar riéndose en la fragancia mi amor se derretía cerrar los ojos a lo que no se puede imaginar bettyhill lloraba y se lanzaba por el acantilado era difícil pensar en no pensar el saber recordar tu cara ellos no sabían que llegaría pero lo hice tan sigilosamente que me escurrí entre sus calles y avenidas sus advientos partir y renunciar sabiendo que vos no sos mi fiesta mercurio no supone ni prefiere asi que mantente al margen de cualquier periferia histérica a quien chucha podría importarle el andamiaje de sinonimia y obnubilado mentira dejar de creer en el amor más sí en el tiempo y espacio de nuestros cuerpos era imposible que la noche pasara sin que se abriera esta ventana no más manchas en el hipocampo ni a más de mil kilómetros se funde la memoria proxémica es la palabra que agrega solemnemente nimiedades inconfundibles luego de armar la primera cara se armarían las dos líneas paralelas a la primera con un movimiento inverso para la próxima lluvia.