martes

el abstracto inmundo de la piel sin su unidad

si son 36 yo me quedo con mil fantasmas...

Pensábamos un lejano París; todas las vueltas que daríamos sobre aquellas bandejas que nos suben el pelo. Todos los domingos santos practicábamos el sánscrito para atrevernos a cruzar el atlántico y sentirnos de nuevo en ese cementerio del primer día.

y al llegar, mirar el ojo nuevo más antiguo y creer que soñábamos despiertos,
Te acuerdas?, el libro llegó sin páginas.